27 febrero, 2009

Yo adoro a mi ciudad.

Yo vivo en una ciudad donde la gente aun usa gomina, donde la gente se va a la oficina sin un minuto de mas. Yo vivo en una ciudad donde la prisa del diario trajin parece un film de Carlitos Chaplin, aunque sin comicidad. Yo vivo en una ciudad que tiene un puerto en la puerta y una expresion boquiabierta para lo que es novedad. Y sin embargo yo quiero a ese pueblo, tan distanciado entre si, tan solo, aunque no soy mas que alguno de ellos: sin la gomina, sin la oficina, con ganas de renovar. Yo adoro a mi ciudad aunque su gente no me corresponda, cuando condena mi aspecto y mis ondas con un insulto al pasar. Yo adoro a mi ciudad cuando las chicas con sus minifaldas parecen darle la magica espalda a la inhibicion popular. Yo adoro a mi ciudad aunque me acuse de loca y de mersa, aunque guadañen tu pelo a la fuerza en un coiffeur seccional. Y sin embargo yo quiero a ese pueblo porque me incita la rebelion y porque me da infinitos deseos de contestarles y de cantarles mi novedad.
Miguel Cantilo.
BAAAAAAAAAASTAAAAAAAAAAA!

20 febrero, 2009


Acá me estoy estando, ni flaco ni tan convidado. Vecino de mi mismo, doliendo para averiguarme ¿Dónde voy a estar ayer? Me miró de reojo el corazón y el me sonríe con puntos suspensivos: "bienvenido al club de los otra vez solitos...". Respirar, dar de nuevo y respirar. Y si el destino mira mal hablarle al oído y pedirle cartas. Respirar, mas que nunca respirar, sacudir el cascaron y sacarse de encima la modorra, el que dirán, tres o cuatro heridas. Me siguen como perros flacos las novedades del pasado, yo me hago un nudo en el pulgar para acordarme de olvidarme ¿Cuándo empiezan los después? Y como tengo ojeras por curar me acuesto en el hombro de mi suerte. Ojala que huela bien esto de perderse. Respirar, dar de nuevo y respirar. Si el destino mira mal hablarle al oído y pedirle cartas. Respirar, mas que siempre respirar. Suspender el cascaron, sacarse de encima la costumbre de sangrar por la vieja espina. Y como tengo sueños que perder, algunas noches madrugo a contra pierna. Ojala que venga al pie todo lo que venga. Respirar, dar de nuevo y respirar...


Ivan Noble.



17 febrero, 2009


Ni san ni sa ni brisa ya corren mi nube de algodón. Ni los, ni nos, ni vos ni yo debemos cargar esta cruz. Comprender, aceptar. Hicimos nuestro camino al caminar y hoy decidimos frenar acá. No vamos al mismo lugar. Trate de hacer a mi bien tu bien. Y ves bien que me salio mal. No acostumbro a fracasar. Dijiste hasta acá, ya fue, me voy. Mi vida no está junto a vos. Ya me canse que te de igual si soy feliz o no lo soy. Comprender, aceptar. Parecía tan fácil como sumar. Tu amor y mi lealtad, mi ternura y tu amistad. A veces Marte y Venus se llevan mal, no es cuestión de maldad. Es duro aprender amar. Y acá estoy despidiéndome, mascando tu rencor, lo se. No me quedo más que aceptar: soy tan culpable como vos. Yo también deje de regar la flor de la superación. Comprender, aceptar. Prometiste cuidarme sin importar. Y hoy ya no importa mi bienestar. Lo importante es tu ansiedad. Creció mi vida al azar, una vez sabes, no me gusta apostar, siempre me toco pagar. Yo me propuse superar tu ausencia, a pesar del dolor. Vos preferís no analizar, seguís en busca del amor. Comprender, aceptar. Por más gotas de sal que le robe al mar, por más flores que un rosal, hoy nos toca despegar. Por más gritos de paz, por más soledad que hoy castigue mi voluntad. Por los dos ya no va más. Y acá estoy despidiéndome, mascando tu rencor, lo se. Estoy confiando que el tiempo nos diga que hacer. Y acá estoy despidiéndome, mascando tu rencor, lo se. Estoy confiando que el tiempo nos dirá que así estuvo bien.





Juan "Piti" Fernandez.

16 febrero, 2009


Que los ruidos te perforen los dientes, como una lima de dentista, y la memoria se te llene de herrumbre, de olores descompuestos y de palabras rotas. Que te crezca, en cada uno de los poros, una pata de araña; que sólo puedas alimentarte de barajas usadas y que el sueño te reduzca, como una aplanadora, al espesor de tu retrato. Que al salir a la calle, hasta los faroles te corran a patadas; que un fanatismo irresistible te obligue a prosternarte ante los tachos de basura y que todos los habitantes de la ciudad te confundan con un madero. Que cuando quieras decir: "Mi amor", digas: "Pescado frito"; que tus manos intenten estrangularte a cada rato, y que en vez de tirar el cigarrillo, seas tú el que te arrojes en las salivaderas. Que tu mujer te engañe hasta con los buzones; que al acostarse junto a ti, se metamorfosee en sanguijuela, y que después de parir un cuervo, alumbre una llave inglesa. Que tu familia se divierta en deformarte el esqueleto, para que los espejos, al mirarte, se suiciden de repugnancia; que tu único entretenimiento consista en instalarte en la sala de espera de los dentistas, disfrazado de cocodrilo, y que te enamores, tan locamente, de una caja de hierro, que no puedas dejar, ni por un solo instante, de lamerle la cerradura.

Oliverio Girondo.

14 febrero, 2009


Llorar a lágrima viva. Llorar a chorros. Llorar la digestión. Llorar el sueño. Llorar ante las puertas y los puertos. Llorar de amabilidad y de amarillo. Abrir las canillas, las compuertas del llanto. Empaparnos el alma, la camiseta. Inundar las veredas y los paseos, y salvarnos, a nado, de nuestro llanto. Asistir a los cursos de antropología, llorando. Festejar los cumpleaños familiares, llorando. Atravesar el África, llorando. Llorar como un cacuy, como un cocodrilo... si es verdad que los cacuíes y los cocodrilos no dejan nunca de llorar. Llorarlo todo, pero llorarlo bien. Llorarlo con la nariz, con las rodillas. Llorarlo por el ombligo, por la boca. Llorar de amor, de hastío, de alegría. Llorar de frac, de flato, de flacura. Llorar improvisando, de memoria. ¡Llorar todo el insomnio y todo el día!

Oliverio Girondo.

Un final hermoso que yo misma busqué. Todo pasa por algo y hoy puedo decir que nunca me hizo mal, que no me arrepiento de nada. Aprendí y ahora estoy mejor, aunque quiera volver a caer me acuerdo de vos, la frente en alto y sigo…Pido perdón, digo gracias. Lo que pasa dentro nadie lo nota. Las heridas se abren y vuelven a sangrar. No hay mal que por bien no venga. Porque hoy el dolor ya no lastima, mis dudas tienen miedo de vos. Buscándote tal vez me encuentre, sin saber que mañana no vas a estar. Pido perdón, digo gracias. Lloro, me caigo, peleo. Mi suerte ¿Quién sabe donde está? El destino, la vida nos acortan el camino. Pido perdón, digo gracias. Y este calor que nos abraza. La suerte no llega y el camino, cada vez más corto.


M. Grosso

02 febrero, 2009


I don't wanna wait in vain for your love. From the very first time I blessed my eyes on you, girl, my heart says follow through. But I know, now, that I'm way down on your line, but the waitin' feel is fine. So don't treat me like a puppet on a string, 'cause I know I have to do my thing. Don't talk to me as if you think I'm dumb, I wanna know when you're gonna come. I don't wanna wait in vain for your love. 'Cause if summer is here, I'm still waiting there. Winter is here, and I'm still waiting there. It's been three years since I'm knockin' on your door, and I still can knock some more. Is it feasible? I wanna know now, for I to knock some more. In life I know there's lots of grief, but your love is my relief. Tears in my eyes burn while I'm waiting, while I'm waiting for my turn.


Bob Marley.